El trading es una buena opción de inversión, que básicamente consiste en comprar y vender activos cotizados con bastante liquidez de mercado, tales como las acciones, las divisas y los futuros. Hablamos de un mercado financiero electrónico y ampliamente regulado. Como objetivo está la obtención de un beneficio a nivel económico cuando la operación consigue generar una plusvalía.
Hablamos de una operación bursátil de claro carácter especulativo, lo que hace que se someta a las alteraciones del mercado. En este sentido, las operaciones están basadas en adquirir un activo para venderlo a un precio más alto o vender un activo, de tal forma que se pueda comprar nuevo por costes más reducidos.
¿Es posible vivir del Trading?
Sí que se puede vivir, pero no es algo que pueda la gran mayoría de la gente. Sepamos que el trader es quien adquiere y vender un activo cotizado con más o menos éxito, con independencia del plazo. Esto hace que si alguien pensó que un trader es una persona que tiene poderes especiales, no es para tanto.
Entre los principales motivos por los que es popular el trading ha sido por la llegada de las nuevas tecnologías, pues hay plataformas online que están especializadas en operar y que actúan como intermediarios en las operaciones o brókers.
Estas plataformas lo han democratizado todo, pues aquella figura del inversor dando instrucciones a los brokers ha desaparecido en la mayor parte de los casos.
¿Qué se necesita para operar en trading?
Se necesita, evidentemente, contar con un ordenador personal, mejor si es portátil y con la debida conexión a Internet. De igual forma hay que contratar a un bróker, que suministrará la plataforma de trading y que nos debe dar:
Gráficos en tiempo real del comportamiento del producto con el que vamos a operar, así como poder realizar contratar cotizaciones en tiempo real en los diferentes mercados y valores en los que estemos interesados.
Mejor que sea una plataforma multimercado, para poder acceder así a varios productos y mercados siempre desde el mismo bróker. Se puede gestionar el riesgo de las posiciones mediante varios tipos de órdenes.
Siempre, eso sí, hay que estar seguros de que el trader online tenga acceso directo a los mercados. Hay que tener una cantidad de dinero que no vayamos a precisar para comenzar a invertir, de tal forma que pensemos también que las operaciones van a llevar una comisión en este sentido.
Hay que pensar que dependiendo de la operación que realicemos, tanto el producto como el mercado en el que queramos operar, el regulador del mismo pueden exigir una serie de garantía cuando abramos una serie de posiciones en el mercado.
¿Qué estudiar para ser un buen ‘trader’?
Para conseguir una serie de objetivos profesionales en ese sector no existen las fórmulas milagrosas, pero si unos estudios.
Los traders tienen una carrera que desde fuera parece atractiva, pues pueden lograr altos beneficios económicos en poco tiempo, aunque hay una serie de incógnitas que a mucha gente le frenan para tomárselo como opción profesional.
Tener la formación necesaria es importante, pues para poder operar en esta clase de entornos debemos saber lo que hacemos. Una formación con la que se pueden evitar pérdidas financieras que sin duda hacen bastante daño a la economía personal.
En la red hay muchos cursos online que tratan sobre el trading, aunque no debemos olvidar que hay centros formativos y también academias presenciales. De todas formas no olvidemos que es necesario hacer la elección con el debido criterio para comenzar a operar.
Las opciones cada vez son más mayores, no solo en herramientas, también en cuanto al número de operadores para hacer trading. Habrá que conocer conceptos nuevos, profundizar en el análisis técnico, las clases de órdenes, etc.
Pensemos que el trading como tal es una práctica no exenta de riesgos, por lo que va a ser siempre fundamental el reforzar de manera importante los conocimientos adquiridos y no gastar dinero de manera irresponsable. Los expertos creen que es bastante mejor que el trading como tal se pueda planificar como una carrera a largo plazo, donde el riesgo sea el menor posible y así dejarnos llevar por la ambición de conseguir beneficios de manera inmediata, lo que es una buena medida para que no nos puedan suceder esos sustos a nivel financiero que nos pueden llevar, sin duda a la bancarrota. Tengamos en cuenta que esto no es solo suerte, si se quiere ser buen operador a la larga, hay que estudiar sí o sí.