Nos hemos acostumbrado a hablar de tecnología solamente cuando nos referimos a ordenadores, móviles, tablets y demás aparatos de este estilo. Y la tecnología es mucho más que eso. Cada vez hablamos menos de tecnología cuando nos referimos, por ejemplo, a la fabricación de coches cada vez más inteligentes. Y es curioso, porque este tipo de productos dispone de una mayor capacidad tecnológica y más elementos de última generación que muchos ordenadores. Por eso reivindicamos la figura del coche como máxima expresión de la evolución de la tecnología y de todas y cada una de sus aplicaciones.
Son muchos los negocios que se han tenido que adaptar a la llegada de esas nuevas tecnologías en los vehículos. El sector de la automoción es uno de los más importantes en nuestro país tanto en términos de facturación como en lo que respecta a número de empleados. Este es uno de los motivos por los que se presta tanta atención a lo que sucede en este tipo de mercados. Y la tecnología ha permitido hacer mucho más fácil y más eficiente el trabajo de todas esas personas tanto aquí, en España, como en otros países.
Los talleres son los que más se han tenido que adaptar a la llegada de esas nuevas tecnologías. Cuanta mayor y mejor es la tecnología utilizada para producir un coche, mayor es la tecnología que se tiene que emplear para reparar cualquier tipo de problema que se haya ocasionado en él. Y es que no es para menos. Para los talleres es un reto constante hacer posible esta adaptación y poder así cumplir con las exigencias y las necesidades de los clientes. Algo que no se parezca a esto implica un riesgo bastante grande: el de perder a una buena parte de la clientela.
Un negocio que crece
Son muchas las personas que opinan que cada día es más difícil sacar adelante un taller que necesite un mayor equipamiento tecnológico. El motivo es que la tecnología no es barata ni mucho menos, algo que desde luego es cierto. Pero es evidente que esa no es una condición como para echarle toda la culpa de la falta de capital a la tecnología. Un artículo que fue publicado en la página web Infotaller informaba de que, en el año 2018, había crecido un 0’5% el número de entidades de este tipo en España.
Y es que no hay que ver en la tecnología una enemiga. La situación es más bien la contraria: es nuestra aliada para darle una vuelta a nuestra imagen de marca. Una noticia que vio la luz en la web del diario ABC informaba de que el 32% de los talleres españoles tenía una antigüedad mayor a 21 años. Si no hacemos algo por transformar esa imagen de marca, está claro que, después de todo ese tiempo, se nos va a considerar como una entidad anticuada. Y ese es uno de los mayores peligros que tenemos que tener en cuenta y que tenemos que evitar.
La tecnología es uno de los aspectos claves a la hora de garantizar cuestiones como lo son la eficacia y la eficiencia dentro de un taller mecánico. Es algo que cada vez más responsables saben y que se va implementando en una mayor medida en lo que respecta a todos los negocios del sector. Hemos querido obtener un ejemplo de ello y por eso hemos hablado con los profesionales de Taller Auto Babel, uno de los negocios que, en los de mantener su imagen y su cartera de clientes, más pronto reestructuró su maquinaria tecnológica y sus procesos. Los resultados, según nos han comentado sus responsables, han sido realmente positivos.
Más futuro y más competencia
Está claro que este tipo de negocios van a seguir siendo útiles de cara al futuro. Es evidente que los coches, como cualquier otro aparato tecnológico o mecánico, se estropean por un buen manojo de razones. Ese es el motivo por el que van a seguir existiendo negocios como estos, que además van a seguir viendo cómo aumenta el número de entidades que constituyen su competencia. Es algo para lo cual todos los talleres de este país se tienen que ir preparando.
No cabe la menor duda de que los talleres prestan un servicio que es fundamental para garantizar nuestra movilidad y libertad. Un coche es sinónimo de ello, y es este el motivo por el que tenemos que cuidar del nuestro como si fuera nuestro hijo. Para ello, disponemos de un buen sector automovilístico que cuenta con el mejor arma para prestarnos el mejor servicio. Ese arma es la tecnología, una manera de entender la realidad que nos fascina y que hace posible que podamos conseguir mejoras en diferentes campos sin que para ello tengamos que dedicar un esfuerzo mayor.